Siempre hay una excusa para celebrar el amor, ya sea en pareja o con uno mismo! San Valentín es el motivo perfecto para cuidarse, mimarse y disfrutar de un fin de semana de lo más exclusivo con el Mediterráneo como telón de fondo.

Marbella Club, es ese sitio que te hace sentir especial. Este año, el exclusivo hotel marbellí deleita a sus huéspedes con increíbles propuestas gastronómicas, así como tratamientos wellness ideales para conectar con uno mismo o en pareja.

El hotel cuenta con 115 habitaciones y suites y una colección de 15 villas, que se convierten en el enclave de ensueño para aquellos que buscan un extra de privacidad.

Para una cena romántica, El Grill es un clásico dentro de la oferta del hotel que nunca falla. Para los amantes de la carne, este restaurante es la opción perfecta durante cualquier estación del año donde degustar los mejores platos a manos del maestro parrillero Roque Juárez. Además, presume de un entorno inigualable, desde su espacio interior donde visualizar la propia parrilla y para la temporada de invierno hasta su impresionante terraza donde disfrutar de una velada durante la caída del sol del mediterráneo rodeado a la luz de las velas.

Tras la cena, no hay nada como brindar por el amor con uno de los mejores cócteles de autor en Rudi´s, un bar encantador inspirado en el Conde Rudi von Schonburg que hace de este lugar un acogedor refugio de invierno y el escenario perfecto para acabar la noche.

Para coronar el fin de semana, la oferta wellness especial San Valentín para realizar en pareja es ideal para aquellos enamorados que deseen llevar su relación al siguiente nivel, como hacer Hatha Yoga en el Yoga Deck de la Finca Ana María hasta disfrutar de un partido de pádel con otras parejas en la pista de pádel Príncipe Alfonso.

Disfrutar de uno mismo, quererse y cuidarse también es perfecto en San Valentín. Este idílico hotel se convierte en la escapada ideal para pasar un fin de semana de desconexión y tener tiempo de calidad con uno mismo.

Desde comer en El Olivar at The Garden Pool en el corazón de los jardines y disfrutar de la cocina del Chef Andrés Ruiz, que se basa en la cocina mediterránea saludable, hasta conocerse mejor a uno mismo en el estudio holístico con sus meditaciones con cuencos tibetanos o ceremonias de cacao hasta lecturas de aura o iridología. Sin duda un refugio de paz y tranquilidad rodeado por la serenidad de la naturaleza, que invita a probar prácticas y sesiones que armonizan cuerpo y mente, ayudando a conectar con nuestro yo interior.

Pasear por la Finca Ana María y disfrutar de uno mismo, es sin duda el mejor plan para este San Valentín. Esta propiedad anexa al resort en el que durante años fue el hogar de la familia von Bismarck, antiguos amigos de los Hohenlohe.
La finca, con una extensión de 50.000 metros cuadrados, se plantea como una plataforma interactiva de aprendizaje con la preservación de la biodiversidad y la creación de un lugar en el que disfrutar del bienestar en todas sus versiones como objetivos principales.

Sin duda, el mejor plan para disfrutar solo o acompañado el fin de semana más romántico del año está en Marbella.

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