Hace unos días pudimos disfrutar por todo lo alto de la inauguración de la Terraza del Lago del restaurante Mena. Ubicada en el Centro Comercial La Finca Gran Café, la terraza de Mena se erige a los pies de un fabuloso lago que le da nombre. Un espacio con capacidad para 160 personas presidido por un bonita barra de mármol, abierto para todos los públicos y cocina non stop de la mañana a la noche. 

La Terraza se complementa con zonas de mesas altas para el picoteo, mesas bajas a la orilla del lago para disfrutar de la propuesta gastronómica desde la hora del desayuno hasta la hora de la cena y dos sugerentes pantalanes con forma redondeada que, con su mobiliario chill out, se convierten en el espacio perfecto para disfrutar del “tardeo” con coctelería de autor y una puesta de sol insuperable. Además, la pérgola conocida como Oasis, que en invierno funciona como comedor acristalado, se suma a las zonas de verano mediante la apertura completa de las cristaleras, funcionando como terraza cubierta.

La carta es un canto al disfrute en el que se aúnan la frescura del raw bar -con propuestas como el Carpaccio de gamba roja con yema ahumada, crujiente de clara y caviar, el Tiradito de hamachi con ají amarillo o el Ceviche de corvina y mango con leche de tigre de maracuyá y rocoto- con la contundencia y la profundidad de sabor de los platos elaborados en el fuego de las brasas y el horno de leña, auténtico santo y seña de la cocina de MENA, adaptados al formato de terraza como sus Tacos de chuleta madurada con puerro crujiente, kimchi y guacamole, el Gran puerro en cinco texturas preparado al horno de leña,  la Berenjena asada con parmesano, mozzarella y pesto o la Ensalada César con -un delicioso- pollo a la parrilla. También hay espacio para una interesante selección de chacinas, salazones y quesos, y para el laterío gourmet de la marca Doña Tomasa.

En La Terraza del Lago de MENA, no falta el guiño a lo castizo con platillos de picoteo como las Croquetas de Jamón Ibérico, la Ensaladilla de gambas a la brasa con encurtidos, los Torreznos de cochinillo con patatas revolconas o las Patatas Bravas con salsa de kimchi y alioli suave de ajo negro.

La propuesta líquida también cobra protagonismo en este proyecto que ofrece más de 300 referencias de vino desde su gran bodega, que ocupa un espacio central en MENA, y una interesante carta de coctelería clásica y de autor diseñada por Rafael Belmonte y Alonso Serrano, quienes desde la barra, juegan con sugerencias como el cocktail AROMA DE LUMBRE: Makers Mark, licor de café, oloroso, bitter de nuez negra y angostura o el INFERNO: Belvedere, fruta de la pasión, chocolate blanco, lima y prosecco.

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